Un bautizo es uno de los días más importantes que vivirás junto a tu hijo.
Una de las pocas celebraciones donde toda la familia y personas íntimas se reunen en un sólo lugar para presenciar la entrada del bebé a la vida Cristiana.
Aquí no hay segundas oportunidades, un fallo de organización, un retraso o un detalle mal cuidado puede convertir lo que debería ser un día memorable en uno para olvidar.
Por eso, es muy importante que todo salga como la seda.
Para que tu y tu familia puedan disfrutar de este día tan bonito sabiendo que hay profesionales detrás que tienen todo bajo control.
Nos cuentas tu idea sobre el bautizo
Todo comienza con lo más importante, escucharte.
Nos cuentas cómo imaginas la celebración, el estilo que te gusta y el presupuesto con el que quieres trabajar.
Diseñamos tu propuesta personalizada
Con esa información, elaboramos un plan a medida que incluye decoración, catering, música, animación y cada detalle necesario para que el bautizo sea exactamente como lo sueñas.
Coordinamos cada detalle
Nos encargamos de gestionar proveedores, horarios y montaje.
Revisamos todo antes para que no haya sorpresas y tú no tengas que preocuparte de nada.
Supervisamos el día del bautizo
El gran día estamos presentes de principio a fin: cuidando la ambientación, el sonido y cada momento especial.
Mientras tanto, tú y tu familia solo os dedicáis a disfrutar y a crear recuerdos inolvidables junto a vuestro bebé.